Campo formativo De lo Humano y lo Comunitario  Fase 2  Educación preescolar


El campo formativo de lo humano y lo comunitario, correspondiente a la fase 2 del proceso educativo, tiene un enfoque integrador que contribuye al desarrollo integral de niñas y niños. Se enfoca en el aprecio de la diversidad, la vida en comunidad, la búsqueda del bien común, y la participación activa para mejorar la calidad de vida de todos.

Este campo formativo promueve que los niños reconozcan cómo sus tradiciones, costumbres, saberes y formas de organización familiar y comunitaria influyen en la construcción de su identidad personal y en su sentido de pertenencia. A través de su diversidad étnica, cultural, lingüística, de género y capacidades, los niños aprenden a valorar las diferencias, a dialogar y convivir en un ambiente de respeto, solidaridad y empatía.

En esta fase, se pone énfasis en que los niños vivan diversas experiencias cercanas a su realidad, que les ayuden a comprender quiénes son y cuáles son sus posibilidades y límites. Se promueve que establezcan relaciones sanas con personas de distintas edades y contextos, que expresen sus ideas y emociones, regulen sus maneras de actuar, mantengan hábitos para una vida saludable y tomen medidas de seguridad.

Los educadores juegan un papel crucial en este proceso. Es fundamental que se mantenga la congruencia en las formas de actuar y de dirigirse hacia las niñas y los niños. Esto implica ofrecerles en todo momento un trato digno y respetuoso, considerar sus necesidades y características, y garantizar su participación y aprendizaje en igualdad de condiciones.

Los contenidos del campo formativo están diseñados para favorecer gradualmente el desarrollo de habilidades cognitivas, afectivas, motrices, sensoriales y sociales de los niños. Se promueve la comprensión de las emociones desde el contexto social y cultural y la construcción de vínculos afectivos. Además, se enfoca en la solución de conflictos mediante el diálogo para una convivencia armoniosa y el cuidado de la salud para mantener una vida personal y colectiva saludable.

El enfoque integrador de este campo formativo reconoce que el desarrollo de la persona implica un componente individual y un componente social importante. Por ello, se busca diseñar propuestas pedagógicas acordes con la realidad social, cultural, territorial y educativa de cada niño. Aunque los contenidos se presentan por separado, están interrelacionados y deben trabajarse de manera articulada y en vinculación con los contenidos de los otros campos formativos.

En resumen, la fase 2 del campo formativo de lo humano y lo comunitario sienta las bases para una educación inclusiva, respetuosa y orientada al bien común, permitiendo a los niños desarrollarse plenamente como individuos y como miembros activos de la comunidad. Este enfoque pone a los niños en el centro del proceso educativo, equipándolos con las herramientas necesarias para prosperar en un mundo diverso y en constante cambio.